En primer lugar, las uvas cuando llegan a la bodega,tomamos muestras y las analizamos, para conocer parámetros analíticos muy importantes de cara al resultado final, estos parámetros son el grado baumé, la acidez, el color y su estado sanitario.
En función de éstos parámetros clasificamos la uva por calidades, rechazando aquella que no alcance el nivel exigido para nuestros vinos.
A continuación, descargamos las uvas en las tolvas donde, a través de las despalilladoras, separamos la uva del raspón, seguidamente, las uvas tintas las introducimos en los depósitos de fermentación, y en prensas neumáticas, en el caso de las uvas blancas, que es, en este momento, donde vamos a obtener el zumo de la uva, para ser limpiado y posteriormente introducido en los depósitos de fermentación.